Quiénes Somos

Aniversario 2024, Iglesia Metodista de la Victoria

La Iglesia Metodista es una comunidad de fe que resultó de la misión metodista del siglo XIX en nuestro continente y en el Perú, en particular. Surgió en el contexto del desarrollo de la misión en su dimensión evangelizadora y civilizadora del metodismo histórico que hoy continúa, asumiendo el “corazón de la misión de Dios”. En este aspecto, la Iglesia Metodista es una expresión de la acción del “Dios misionero”, que es el Dios de la Biblia y de la historia.

Como iglesia estamos llamados y llamadas a dar testimonio de la gracia de Dios en el mundo y a ser un instrumento para su gloria, poniendo nuestra vida al servicio de la comunidad; así como Jesús lo hizo, dándonos ejemplo de compromiso y solidaridad con el prójimo.

132 años Primera Iglesia
Reunión Iglesia Metodista

Reconociendo la acción evangelizadora que a través de los años la Iglesia Metodista Unida desarrolló en nuestro país, apreciamos todos los valores de la tradición metodista por lo cual nos sentimos incorporados a una de las grandes ramas de la cristiandad, cuyo espíritu ecuménico nos une, al mismo tiempo, a toda la iglesia de Cristo.

La Iglesia Metodista, guiada por el Espíritu Santo, se define como una iglesia que se sostiene y proclama la gracia de Dios como la afirmación de fe distintiva. En esta perspectiva estamos llamados y llamadas, con el compromiso del anuncio del Reino de Dios y la Misión, que comparte el amor de Jesús.

Tenemos como responsabilidad ser una iglesia de discípulos y discípulas que apoye en las necesidades espirituales y sociales de nuestro pueblo impactando en su comunidad local y la sociedad con el poder del evangelio de santidad.

Misión

Anunciar las buenas nuevas del Reino de Dios, asumiendo nuestra mayordomía orientada al autosostenimiento; siendo responsables con el cuidado de su creación, sirviendo a nuestro prójimo, cumpliendo el rol profético según nuestra realidad y cultura, bajo la dirección del Espíritu Santo.

Visión

Ser una iglesia misionera autosostenida y comprometida con la proclamación del Reino de Dios, haciendo discípulos y discípulas que impacten en la sociedad.